domingo, 10 de octubre de 2010

VIAJANDO A HANOI

Hola princesa!!!, mientras papá duerme, yo te escribo a tí, a toda la familia y a todos los amigos que siguen este blog desde mi portátil en el asiento 49A de nuestro vuelo Madrid – Bangkok. Llevamos 3 horas y media de vuelo, ya hemos tomado el aperitivo, comido, tomado el café, un refresco y ahora la mayoría de la gente que va en este Boeing 747 de dos plantas, ya duerme, pero aún nos quedan unas 10 horas de vuelo.
Anteayer nos hemos puesto a hacer las maletas y sólo nos quedaba una que la terminamos ayer. Las de anteayer las teníamos pesadas con lo que la Thai obliga a volar, pero cuando acabamos la mas grande, la cerramos y la pesamos, llevábamos 8´5 kilos de mas. Nos quedamos atónitos, no sabíamos que hacer , ¿pero si necesitábamos todo?, bueno… allí nos ves a última hora del día y con un gran problema. Empezamos a sacar cosas, lo primero, algunos de mis pares de zapatos que papá no sabía y me preguntaba… ¿pero tú vas a Vietnam o vas a la pasarela Cibeles???, jajaja, ahora me río pero en aquel momento no soportaba quedarme sin mis zapatos. Después papá se encontró con el “quitamanchas”, sl, ya lo sé, estoy como una cabra, pero también es necesario, nunca se sabe como funciona la lavandería del hotel. Continuamos, y encontró 6 pashminas, y me dice… No, a la Cibeles,no, por supuesto… ¡¡tú a la de Nueva York mínimo!. Bien, la cosa pintaba muy mal, porque aunque habíamos quitado 4 kg., todavía faltaban otro 4, y… claro, estaba Norby en casa ayundándome a hacer las maletas y también salta… pero señora, ¿a dónde va Vd. con todo este neceser lleno de pinturas si con el calor que hace no las usará?, y claro, ya me ves a mí quitando mi neceser de pinturas y dejando un solo rimmel, ¡¡¡que horror, si es que me iban a dejar sin nada!!!. Finalmente, quitamos  tus pañales que se pueden comprar en Hanoi y algunas cosillas las llevamos sin caja, pero… tanto quitamos que el peso estaba bien pero llévabamos una maleta enooorrrrme medio vacía, así que se me ocurrió la maravillosa idea de llamar a mi amiga Mari Celi para ver si tenía un trolley y pasar lo del neceser al trolley y llevar otra maleta mas pequeña. En fin…. Que al final llevamos dos maletas grades, 2 trolleys y una mochilla ya que en mi bolso era imposible meter las dos carpetas a reventar tamaño folio con tus documentos y los nuestros, y todo lo que suele llevar el bolso de mamá que no es poco.
Bien, nos acostamos tarde y hacía años que no me pasaba algo igual, no fui capaz de dormir ni un solo minuto hasta las 4h. que nos tuvimos que levantar. A las 5 en punto estaba Mari Celi en la puerta de casa para llevarnos al aeropuerto y a las 5:30 ya estábamos en la cola de facturación. Aprovecho para felicitar a Europa Travel y concretamente a José Ibáñez por sus gestiones ya que todo ha salido fantástico. En el aeropuerto de Alvedro  hemos facturado las maletas directas a Hanoi y las tarjetas de embarque de los 3 aeropuertos, así que llegamos a Madrid con nuestro equipaje de mano y estuvimos muy relajados hasta poco antes de embarcar que se me salía el corazón por la boca y papá y yo nos zampamos dos orfidales que nos dejaron “neke” una horita que fue la que tardamos en despegar.
Después llegaron Mariam y Eduardo (Cádiz) y a continuación Vicen y Joaquín (Badajoz) y nos hemos sacado unas fotos en el aeropuerto justo en la puerta B20 por dónde tendríamos que embarcar hacia Bangkok. La verdad es que son encantadores, ya los conocíamos de hablar todos los días y escribirnos, pero no físicamente.

A la llegada al avión nos recibía la tripulación de la Compañía Tailandesa (Thai) ataviadas con unos preciosos vestidos largos típicos de su país, ellas son unas bellezas, ellos no, lo siento chicas.
Todos estamos en la parte baja del avión pero Vicen y Joaquín unas filas mas atrás, y Mariam y Edu en los asientos de la derecha y también hacia atrás. Nos levantamos de vez en cuando a ir al baño y de paso nos visitamos mutuamente.
Hace un ratito levanté la persianilla de la ventana y es totalmente de noche y son las 17:30h., (hora española) y no tengo ni idea de por dónde andamos. Están echando una peli pero me puse los cascos y tan sólo se puede escuchar en Tailandés (va a ser que aún me faltan unas clases) y en inglés que no me apetece ponerme a prestar mucha atención.
Llevamos un disco duro externo de 500 Gb. lleno de películas que nos grabó mi compañero Ricardo  y he pasado unas cuantas a un pen drive, pero… nos hemos olvidado los auriculares y tengo miedo que la colega de al lado que “pifa” como una loca y se toma unos cocteles que ni los molotov, como tengo que estar todo el tiempo “Excuse me”, para que me deje ir al baño porque tiene unas  piernas que parecen un día sin fin, me suelte un remo.
Bueno… papá ya despertó y está leyendo el libro que nos  regalaron los primos Olivia, Berta y Rubén y que además nos lo dedicaron.  Yo ya lo he estado leyendo antes y me partía de risa, así que… a ver papá como reacciona, seguró se esmendrellará de risa.
Voy a descansar un ratito y cuando mañana llegue al hotel, cortaré este texto que he creado en Word y lo copiaré en el blog ya que evidentemente aquí no hay Wifi.
Mañana seguiré contando nuestra aventura. Mari Celi, Lore, que os voy a decir…. que un millón de gracias y que pronto estaremos de vuelta.
Mamá, papá, os echaré mucho de menos y que sepáis que os quiero con toda mi alma. Cuidaros mucho que pronto estaremos de vuelta con la pequeña Aitana, y recordad, si vosotros estáis bien, yo estoy bien.
Un besazo muy grande y hasta mañana.

2 comentarios:

  1. Creo que al final no vamos a coincidir, pero por lo pelos :-(

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  2. Hola familia, que sepáis que yo también estoy enganchada al blog. A ver si cuando tengáis a Aitana en brazos, os queda algún minuto para escribir...yo recuerdo, que hasta se nos olvidaba llamar a la familia, de lo atareados que andábamos...conociéndonos. Muchos besos.

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